El último fin de semana de Junio del 2.007 volvimos a bajar al Algarve. En esta ocasión el centro de operaciones se situa en la villa de Alvor, a unos 8 km de Portimao.
Aprovechamos la estancia del puente playero, para hacer turismo gastronómico "cataplanas diversas, peixe grellado a discrecao, arroz de marisco, etc,...", para unos buenos baños de agua y de sol, aunque el agua estaba fria, la condenada, y finalmente como dice mi colega "para ver piedras".
Para este menester, pusimos rumbo a la villa "vila do bispo". Apenas pudimos recoger información turística (la única oficina de información esta a 10 km en Sagres, y no tenía nada específico de megalitos, pero bueno, al mal tiempo buena cara. A veces, sin embargo, da la impresión de que a la administración sólo le interesa la infraestructura playera.
Por la mañana, pudimos visitar el que yo creía se denominaba menhir de Zavial. Y no es tal, sino que es el menhir de Padrao, cercano al pueblecido de Raposeira y a la playa recóndita de Ingrina (apenas una docena de personas. Pudimos contemplar además varios menhires en la zona de Milrei, cercana a la anterior.
Para finalizar el día logramos realizar (al segundo intento, el de la mañana fue fallido), la ruta "perfectamente indicada desde Vila do Bispo", por el Monte dos Amantes,(que nombre más perfecto para una zona con muchisimos menhires de formas fálicas, algunos cromlech desdibujados, la famosa piedra Escorregadia, con su simbólo elíptico, menhires reutilizados, etc.
Queda para otra ocasión, un curioso menhir el de Aspradantes, en lo alto de una sierra que mira hacia la ermita de "Nossa Senhora de Gualupe", monumento nacional, que estaba cerrado cuando llegamos.
